La función primordial de la presoterapia como tratamiento estético consiste en la eliminación de grasas mediante la activación del drenaje linfático, pero, dejando en un segundo plano su aplicación puramente estética, la presoterapia fue creada con fines terapéuticos para ayudar a mejorar la salud de las personas con problemas circulatorios y de retención de grasas y líquidos. La presoterapia es, por consiguiente, un tratamiento estético con importantes beneficios a nível de la salud de nuestro cuerpo.
El procedimiento que se lleva a cabo para la práctica de la presoterapia es completamente indoloro y muy sencillo, si bien es verdad que visualmente puede resultar algo aparatoso. Se realiza introduciendo las extremidades en una especie de botas o manguitos neumáticos, que tienen una doble pared formando una cámara hinchable, donde, con ayuda de un compresor, se introduce aire a presión que se va dosificando y movilizando según lo programemos.
Mediante este sistema, se logra activar la circulación, lo cual ayuda a eliminar la celulitis, la grasa localizada y también la pesadez en las piernas, várices y otros problemas circulatorios.
La presoterapia tiene efectos positivos en todo el cuerpo, ya que, al evitar la acumulación de grasas y líquidos, favorece la eliminación de toxinas y el cuerpo está más sano y en forma. Además de estos beneficios, la presoterapia es un tratamiento muy relajante ya que el movimiento del aire dentro de las cámaras neumáticas proporciona al paciente un agradable masaje.